El 18 de julio de 1994 se produjo el atentado más mortífero de la historia argentina, y a los pocos días comenzó a urdirse una red para ocultar a los culpables. La mendaz telaraña fue desbaratada gracias a la valentía y la testarudez de unos pocos. Una mera casualidad empujó al joven Nisman a hacerse cargo del juicio más intrincado y resonante de nuestro país, que se pone a la vanguardia mundial en la lucha contra el terrorismo. Matar sin que se note desgrana la historia moderna de los argentinos y cuenta la gesta de Alberto Nisman por revelar una verdad indispensable, en un estilo que combina rigor y emoción, compromiso y ecuanimidad. 342 audiencias, 16 43 testigos, y 2250 horas de declaraciones grabadas, resultaron en una Caja de Pandora, ahora abierta por esta crónica. Sus protagonistas son jueces venales, madres de niños muertos convertidas en adalides de la justicia, jefes de gobierno argentinos, israelíes e iraníes, funcionarios encumbrados que cayeron en las garras de la corrupción, una golpeada sociedad que los dejaba pasar atónita, y un fiscal valiente y pertinaz, que acaba de ser abatido por las fuerzas del odio.